Keanu Reeves es consciente del fenómeno que supuso Matrix. Aunque el ya veterano actor ha protagonizado todo tipo de películas de éxito (otras que no lo fueron tanto, también es verdad), ninguno de sus films puede compararse al impacto en todos los sentidos que causó este clásico de la ciencia ficción. En 1999, cambió el cine fantástico para siempre, así de sencillo.

Lo hizo por múltiples razones, pero sobre todo porque supuso un soplo de aire fresco dentro de una industria que, a pesar del tiempo transcurrido, ya comenzaba a dar sus primeros signos de fatiga. Pero incluso teniendo en cuenta esto último, el propio Reeves ha reconocido que hubo algunas obras que inspiraron Matrix, y que llegaron directamente de un par de animes ciberpunk.

Keanu Reeves regresa a Matrix (una vez más)

Han pasado más de veinticinco años desde que Matrix llegase a los cines, pero a Keanu Reeves le siguen preguntando sobre esta película en cada entrevista. En realidad, no es para menos. En su momento, el film fue una revolución, tanto a nivel conceptual como visual. Aunque hoy sean características normales, el tiempo bala, la estética de cuero y gafas negras y demás crearon tendencia entonces.

Por no hablar, claro, de la forma en la que las escenas de acción desafiaban todo lo visto hasta el momento, con coreografías que parecían más propias de superproducciones asiáticas que de un estreno estadounidense. Si se piensa con perspectiva, Matrix no inventó gran cosa (el tema de la rebelión de las máquinas ya existía en el cine), pero sí fue pionera en la manera de contarlo todo. 

Probablemente, lo rompedor del film pudo hacer que uno de los problemas para las hermanas Wachowski (que por aquel entonces aún eran hermanos) consistiese en explicar su visión a los actores que iban a trabajar en la película. En el caso de Keanu Reeves, él mismo ha confesado qué le pidieron antes del rodaje: ver dos películas anime consideradas grandes clásicos de la ciencia ficción. 

Las películas no fueron otras que las que, para muchos, son las mejores obras fantásticas de animación de todos los tiempos, al menos dentro del género ciberpunk: Akira y Ghost in the Shell. Dos auténticos clásicos japoneses que, aunque comparten algunos elementos, también resultan profundamente diferentes entre sí. Las hermanas Wachowski nunca han ocultado su amor por ambos films.

Dos hitos de la animación japonesa

Keanu Reeves ha reconocido que cuando las directoras de Matrix le recomendaron ver Akira y Ghost in the Shell no estaba familiarizado para nada con el anime. “Ni siquiera sabía qué era”, admite. Pero lo cierto es que ambas producciones eran ya clásicos. Akira, por marcar un antes y un después tanto a nivel técnico como argumental, con una historia de ficción adulta, compleja y fascinante.

Ghost in the Shell, por su parte, fue una de las bases de un universo formado por películas, mangas, unos cuantos animes e incluso una adaptación en imagen real norteamericana. La película narra las aventuras de la mayor Motoko Kusanagi, un ciborg que lidera un equipo de fuerzas especiales de élite. Los dos films tratan temas tan complejos como qué es lo que nos hace humanos. 

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Etiquetas: Películas, Cine