Para mí los móviles mejor en color negro y bloques de aluminio o de titanio y en cuanto a portátiles, de 14 pulgadas y lo más ligeros posible. Por eso cuando pruebo modelos como el Asus Zenbook A14, no puedo parar de pensar por qué no hay más marcas haciendo este tipo de equipos.

Asus ha logrado crear un portátil ultraligero, pero de verdad. Con solo 980 gramos de peso se encuentra entre uno de los más ligeros del momento. 

Además, el ordenador tiene una buena pantalla de 14 pulgadas y de tipo OLED y una autonomía bestial. Incluso el precio es bueno, por debajo de los 1.120 euros.

Dicho esto, no hay duda alguna: lo mejor del Asus Zenbook A14 es su peso, menos de un kilogramo y que sea capaz de mantener en este cuerpo un buen rendimiento para el uso típico de oficina o de estudios.

Yo fui de los que sufrió llevar portátiles de 15 y 16 pulgadas muy potentes en la espalda durante mucho tiempo. No derivó en una lesión, pero bien pudo haberlo hecho. De esto ya hace años y es cierto que hay portátiles de este tamaño que pesan muy poco, pero aun así, son tamaños que más que portátiles son portables.

Desde hace mucho tiempo apuesto por los portátiles de 13 y 14 pulgadas. Sobre todo desde que tenemos ultrabooks con un peso que está por debajo de los 2 kilogramos. Y si un portátil cumple con lo básico, como es buen rendimiento, buena autonomía y una pantalla donde no te dejes los ojos, se lleva todo mi amor.

Asus ha dado en la diana con prácticamente todo. 

Primero, por la autonomía de más de dos días de uso y, segundo, por el rendimiento que el procesador Snapdragon X le ofrece. 

Es suficiente como para tener muchas pestañas de Chrome abiertas, programas de ofimática y algún programa más avanzado, como por ejemplo Visual Studio Code si tienes que desarrollar o Photoshop si tienes que editar alguna fotografía o gráfico.

En mi caso no he necesitado conectarlo a la red eléctrica en un par de días y lo hice porque cuando un producto llega al 30%, me entran los sudores fríos y necesito conectarlo.

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