El Realme C75 es un móvil realmente curioso para la gama de entrada, ya que cuenta con un tipo de resistencia que difícilmente encontrarás por menos de 200 euros, tanto al agua como al polvo.

En este sentido, puedes sumergirlo en agua o mojarlo directamente con un chorro a presión, sin que esto pase factura al terminal, que seguirá funcionando como si estuviera recién estrenado. Durante las pruebas, ha aguantado incluso varias horas en el congelador. 

Es cierto que existen móviles rugerizados que permiten aguantar condiciones extremas, aunque suelen estar relacionados con actividades profesionales de riesgo o entornos militares, no dirigidos al público general.

En el caso del Realme C75, el diseño no es muy diferente a lo que podrías encontrar en el mercado, con un acabado trasero realmente bonito y que no podrás romper por más que lo intentes, como ha sido mi caso.

Características del Realme C75

Lo he llevado al extremo y aguanta todo

A pesar de que al principio da bastante respeto poner a prueba la resistencia de un móvil, tras el primer intento de romperlo todo cambió. Al lanzarlo desde una altura de 1 metro directamente al suelo, el Realme C75 seguía intacto y sin un rasguño.

Así que decidí ir más allá y lo probé como tabla para cortar alimentos, algo que también aguantó de forma sobresaliente, ya que no apareció ningún tipo de arañazo. Pero aposté aún más fuerte y probé con líquidos, algo que el fabricante asegura resistir.

Para ello, las pruebas realizadas han sido varias, desde una inmersión en un cubo con agua durante horas hasta apuntar a sus entradas –el altavoz y el USB de tipo C– con un chorro de agua. En ambos casos, el móvil seguía funcionando perfectamente.

Esto se debe a que cuenta con resistencia IP69 al agua y al polvo, un aspecto que redondea este terminal de Realme, que puede incluso aguantar horas el proceso de congelación en la nevera, algo que me ha sorprendido gratamente.

También ofrece SonicWave, que permite expulsar el agua que haya quedado dentro del dispositivo desde el altavoz, como ocurre en muchos smartwatches.

Durante el tiempo de análisis, en este sentido, no he tenido miedo a que se cayera o se mojara, así que es un terminal perfecto para esos usuarios a los que se les resbala el móvil de las manos con frecuencia.

Ahora bien, has de tener en cuenta que las especificaciones están muy ajustadas a su precio, ya que cuesta menos de 200 euros, así que no encontrarás lo último del mercado, a excepción de su diseño ultrarresistente.

En tal caso, el Realme C75 es un muy buen terminal si va a comenzar a usarlo un adolescente, por ejemplo, al ser un móvil con todo lo básico y a prueba de todo tipo de caídas. A mí, en lo personal, me ha recordado a los Nokia indestructibles.

Sea como sea, la versión inicial con 8 gigabytes de RAM y 128 gigabytes de almacenamiento tan solo cuesta 169 euros, a lo que se suman especificaciones bastante conseguidas, como su autonomía o, adicionalmente, que incluya NFC.

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