No cabe duda de que el fundador de la empresa fabricante de los iPhone dejó un legado inolvidable que ahora lleva Tim Cook en la actualidad. En muchas ocasiones, mencionó las claves del éxito y tanto la disciplina, como la constancia y ser detallista, son cosas fundamentales.

Sin embargo, la historia de Steve Jobs no siempre fue pura fortuna, pues tuvo que hacer un gran esfuerzo para surgir, especialmente cuando fue expulsado de Apple en 1985 por desacuerdos con la junta directiva.

La manera en la que pudo regresar a la compañía que él mismo creó fue con una estrategia vinculada a uno de sus vehículos más queridos, el Porshe 911. Sí, un vehículo estuvo involucrado en todo esto y tal vez fue crucial para que el gigante tecnológico de Cupertino se convirtiera en lo que es hoy.

Steve Jobs pudo regresar a Apple gracias a NeXT y a su Porshe 911

Lamentablemente, el genio de la gran manzana mordida se encontraba en una situación difícil tras su expulsión de la compañía, momento en el que tuvo que seguir por otro camino fundando una nueva empresa llamada NeXT.

Este nuevo proyecto se centraba en desarrollar equipos de alta capacidad con un sistema operativo innovador que tenía como nombre “NeXTSTEP”, consiguiendo grandes avances que eran llamativos para muchos conocedores del sector.

En ese entonces, Steve Jobs seguía con su obsesión por los coches junto a su amigo Randy Adams, especialmente con el Porshe 911 negro, el cual reemplazaba cada seis meses para no tener una matrícula, algo que definitivamente lo caracterizaba.

No obstante, su gran aprecio por este vehículo le iba a costar muy caro cuando el magnate Ross Perot, fundador de Electronic Data Systems (EDS) y Perot Systems, pensaba invertir en su nueva compañía en 1987.

Jobs creía que Perot iba a pensar que tenían dinero y eso influiría negativamente en las decisiones del negocio, por lo que le dijo a su colega que tenían que esconder los coches antes de que llegara y así fue. El resultado terminó en una fructifica inversión de 20 millones de dólares (19 millones de euros) por parte de Perot. 

A pesar de contar con un gran potencial, NeXT no tuvo tanto éxito, pero fue clave para el futuro de Apple, ya que en 1996 la empresa de la manzana compró la nueva propuesta de Jobs por 400 millones de dólares (381 millones de euros) y fue recontratado.

Desde ese momento, Apple no paró de crecer con el liderazgo del nuevo CEO y el software de NeXt se usó como base para generar macOS e iOS. Por lo tanto, fue sumamente importante que todo esto pasara para llegar a la etapa de oro de Jobs.

Qué hubiera pasado si el Porshe 911 fuera visto por Ross Perot

Según la información de Benzinga, no se sabe con exactitud si esta decisión de ocultar los Porshes influyó en la decisión final Ross Perot, pero lo más probable es que el magnate fuera dudado al ver que contaban con objetos de gran valor, pues hubiera hecho que pensara que no necesitaban a un inversor. 

Eso generaría un giro drástico a toda la historia que se ha contado hasta ahora, porque esos 20 millones proporcionados por Perot para que NeXT pudiera continuar con sus proyectos, fueron la clave para llamar la atención de Apple y retomar a su líder.

Es decir que, un simple detalle como ese, hubiera cambiado absolutamente todo. NeXT hubiera tomado otros caminos y los iPhones que hoy en día se conocen no existirían porque Jobs tal vez no hubiera sido contratado de nuevo por la compañía que fundó. 

Esto deja claro un par de cosas, que esconder la total verdad a veces es necesario para que algo importante pase y que Steve Jobs es un gran ejemplo de esfuerzo y dedicación. 

Nunca dejó de crear cosas y de traer innovaciones con sus grandes ideas, siendo esas las razones por las que Apple decidiera a confiar en su trabajo para volverse una de las personas más influyentes de toda la historia del mundo tecnológico.

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Etiquetas: Steve Jobs