Reseña de Vanilla Essence (Babylon)

Teknalix enero 19, 2023 No hay comentarios

Reseña de Vanilla Essence (Babylon)

Vanilla Essence

El término hentai hoy en día es conocido para cualquiera que esté más o menos al día en el mundillo del anime o el manga, ya sea porque se ha escuchado a algún personaje gritárselo al protagonista pervertido de turno o porque se nos haya ocurrido investigar por nuestra cuenta, terminando irremediablemente en alguna página web de dominio sospechoso y anuncios de cremas de crecimiento milagrosas. Probablemente no sea el mismo caso de vanilla, el argot inglés utilizado para referirse al sexo convencional o aquellas conductas sexuales que entran dentro del espectro que se podría considerar normal.

Tal vez este sea un inicio algo tróspido para una reseña, pero si alguien se pregunta por qué hablo de todo esto es porque ha llegado la hora de sentarnos a conversar sobre Vanilla Essence. Sí, ese manga de contenido explícito para adultos que ha sido récord de ventas y seguramente muchos tengan ya en la estantería. Algunos incluso por duplicado, que toda precaución es poca.

Vanilla Essense reseña

© 2015 Yamatogawa / Akaneshinsha CO., LDT., Tokyo

Duro contra el muro

Hablar del argumento de obras de este tipo es fácil, porque suelen ser absurdamente simples y en ocasiones ni siquiera lo necesitan. O al menos, no existe en ellas una trama con la suficiente importancia o influencia como para poder tratarla como tal. Vanilla Essence es en realidad una recopilación de 9 historias independientes protagonizadas por estudiantes que por azares del destino (y a veces no tan azares) terminan proclamando su pasión por el sexo opuesto con intensos revolcones en cualquier sitio que les pille de por medio.

Tampoco se puede negar la realidad, el manga peca de los clichés típicos del género: pechos grandes, penes aún más grandes y cantidades casi preocupantes de fluidos corporales. No obstante, si dejamos a un lado los estereotipos que siempre están presentes encontraremos lo que realmente guardan sus páginas, una obra agradable, picarona y romántica a ratos como casi todo hentai vanilla, adornada con pinceladas de comedia que la hacen entretenida.

Vanilla Essence reseña

© 2015 Yamatogawa / Akaneshinsha CO., LDT., Tokyo

Lento contra el pavimento

Cuesta definir protagonistas teniendo en cuenta que se trata de historias sin ninguna conexión entre ellas, aunque todas tienen como elemento común el hecho estar siempre encabezadas por una pareja heterosexual distinta. A fin de cuentas tal y como establece su título, uno no debe esperar nada más que una relación sana entre un chico y una chica mientras lee Vanilla Essence. Dicha pareja protagoniza las escenas de principio a fin, con escasa intervención de terceras personas.

Sin embargo, si prestamos un poco más de atención al aspecto gráfico veremos que el foco principal en realidad es el personaje femenino. Ya desde el principio la sobrecubierta nos da la pista al plasmar, con desnudo frontal incluido, a todas las chicas que nos deleitarán con sus encantos en cada una de las páginas. De los tíos ni rastro, aunque si nos fijamos bien podemos ver a algunos de ellos en un rincón espiando por la puerta de la clase como los pervertidos que son. Del mismo modo, las páginas que sirven como portadas de cada capítulo y presentan su título siempre contienen la ilustración de una de las chicas.

Si profundizamos en el contenido página por página, veremos que ellas son las que cargan con la mayor cantidad de peso escénico, tomando posesión de la mayoría de primeros planos y ocupando en proporción mayor espacio en las viñetas. Y lo que es aún mejor, es la proactividad que la mayoría de las chicas muestra a la hora de mantener relaciones, añadiendo aún más peso protagónico e incluso cediendo el control de los acontecimientos, algo de lo que muchas veces la parte femenina carece en el hentai. Esto no solo las sitúa como la fuerza motriz de la escena en muchos casos, sino que alimenta la idea de que cualquier chica puede ser igual de pervertida y activa que su contraparte masculina. En resumidas cuentas, me atrevería a decir que aquí las verdaderas protagonistas son ellas.

Como extra, Yamatogawa comenta cada dos capítulos algunas anécdotas que le han servido de inspiración para diseñar las escenas y sus personajes femeninos, y lo acompaña con algunos de los bocetos preliminares.

Vanilla Essence reseña

© 2015 Yamatogawa / Akaneshinsha CO., LDT., Tokyo

Sin pena en la arena

El dibujo de Yamatogawa es muy agradable a la vista. Los trazos definidos, el movimiento de los cuerpos y las expresiones faciales en éxtasis le alegran el corazón a cualquiera. A pesar de lo comentado anteriormente sobre los tamaños exagerados, las proporciones anatómicas de los personajes son relativamente correctas. Aquí no encontraremos pechos inflados como melones más grandes que una cabeza y con movimientos antigravitatorios, ni tampoco miembros viriles capaces de mandar a alguien a urgencias por una perforación de pulmón.

El nivel de detallismo es el justo y necesario para lo que pretende mostrar, que se percibe en cada gota de sudor y cada vena palpitante. Las facciones de los personajes son redondeadas y suaves, otorgándoles un aspecto amigable y delicado. La mayoría de las escenas cuentan con un fondo diseñado, en lo que entiendo como un recurso que permite una inmersión mayor para el lector, ya que le recuerda en todo momento en qué situación ambiental se encuentra. Otro recurso que se ha utilizado correctamente son los estilos de viñeta. Por ejemplo, los diálogos y parones que realizan los personajes se enmarcan con un estilo típico cuadriculado; mientras que las escenas con más acción y cercanía al clímax sexual muestran un claro sesgado e incluso borran el límite entre viñeta y viñeta, dando una sensación total de movimiento y continuidad.

Sin duda alguna el punto más llamativo es la abrumadora cantidad de onomatopeyas que pueblan las viñetas de este manga. Además por duplicado, ya que en la traducción se ha decidido mantener también el katakana original. Respecto a ello tengo que admitir que en un principio me pareció algo exagerado, hasta que caí en la cuenta de un aspecto fundamental que he mencionado justo antes: la inmersión. Y es que en realidad, lo único que necesita una escena de sexo es justamente eso, los sonidos. Los diálogos durante un momento de desfogue son algo que queda en segundo plano, dando protagonismo a otros elementos como los gemidos, sorbidos y exhalaciones de los involucrados.

El autor no busca únicamente dar una estimulación visual con un dibujo bonito, sino que también pretende completar esa experiencia al lograr una comodidad auditiva para el lector, detallando cada sonido por muy simple que parezca, ayudando a que se sitúe mentalmente en la propia escena y cumpliendo así la fantasía que más le interese en el momento.

Vanilla Essence reseña

© 2015 Yamatogawa / Akaneshinsha CO., LDT., Tokyo

Contento contra el cemento

No se sabe demasiado de Yamatogawa, el mangaka que insufló vida en 2015 a las historias que componen Vanilla Essence. Nació el 18 de enero de 1987 y ha ilustrado manga para adultos al menos desde febrero de 2007, cuando se publicó Aqua Bless en la revista de cómics para adultos Comic Tenma de la editorial Akane Shinsha. Sus obras, que no son demasiadas, han logrado posicionarse lo suficiente en el mercado japonés como para ser licenciadas, traducidas y publicadas en países como Estados Unidos o Francia.

Algunas de las más conocidas probablemente sean Witchcraft, publicado en 2007 y que mezcla el hentai con lo sobrenatural, o el manga de 2009 Tayu Tayu que recibió una adaptación en forma de 4 OVA hentai en 2013 y ha sido licenciada recientemente para su publicación en nuestro país por Ediciones Babylon. Fuera del ámbito del manga, Yamatogawa también ha trabajado en el diseño de un conjunto de trajes bastante reveladores como parte del contenido descargable del videojuego Soul Calibur: Lost Swords.

Sin consuelo en el suelo

Ediciones Babylon publica su primer manga hentai en formato rústico con sobrecubierta de 14,8 x 21 cm. En su interior, 216 páginas en blanco y negro de puro sexo adolescente a un precio de 13,95 €. La sobrecubierta presenta un acabado brillante, mientras que la cubierta está decorada con los bocetos a mano que se realizaron a la hora de diseñar la sobrecubierta. El resultado es un efecto muy interesante, ya que tenemos el diseño en bruto hecho por el mangaka en el interior y el resultado final pulido en la sobrecubierta.

Aquí es cuando debo mencionar dos puntos negativos a la hora de evaluar el ejemplar. El primero es una serie de pequeñas imperfecciones en el filo de la cubierta del tomo probablemente debido a un error en el guillotinado, pero que se ven disimuladas por la sobrecubierta. El segundo, un poco más perjudicial, es un fallo en la impresión de un único diálogo que lo convierte en algo complicado de entender a primera vista.

Cuestiones técnicas aparte, el trabajo de traducción y adaptación realizado es ejemplar. El lenguaje empleado es comprensible y coloquial pero no excesivamente soez, sin cruzar el umbral de lo que podría considerarse como burdamente grosero y a tono con las situaciones que se desarrollan. La redacción por otra parte tampoco presenta errores de coherencia ni gramática.

Vanilla Essence portada con censura

Picante contra el estante

Un poco de picardía es lo único que se necesita para que te guste Vanilla Essence. Es ameno, divertido y para lo que suele ser el hentai, increíblemente sano. No es una obra trascendental para el género ni pretende serlo, pero puede ser un buen punto de partida para aquel que tenga interés en iniciarse en el manga para adultos sin tener que adentrarse en los callejones oscuros de sus subgéneros más polémicos.

Si bien el hentai es muy conocido hoy en día, las obras que llegan licenciadas de manera oficial en nuestro idioma son contadas. En Ediciones Babylon han hecho una apuesta con Vanilla Essence que en mi opinión ha sido acertada y les ha salido muy bien, y tan solo espero que este sea otro pequeño paso hacia la apertura de una industria para adultos que rara vez sale de Japón y menos aún en dirección a España. Si algún día se produce una adaptación animada, me encantaría que alguna distribuidora diera el paso, se atreviera a licenciarla en nuestro país y por qué no, incluso la doblara al castellano.

Lo mejor:

  • El esfuerzo del autor por sumergir al lector en la escena.
  • La adaptación que ha llevado a cabo la editorial.
  • La sobrecubierta es preciosa y luce fantásticamente en cualquier estantería.

Lo peor:

  • Yamatogawa se columpia peligrosamente en aspectos que podrían no considerarse vanilla. Algunos personajes muestran claras tendencias voyeuristas y exhibicionistas, que si bien no molestarán a la mayoría podrían echar para atrás a los más puristas.

 

Vanilla Essence

Bueno

Autores: Yamatogawa

Editorial: Ediciones Babylon
Formato: Rústica de tapa blanda y con sobrecubierta 15 x 21 cm.
Tomos: 1 (Finalizada)